La presidenta de la Comunidad autónoma de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ya no menciona el proceso de desinversión de las filiales de Canal de Isabel II fuera del territorio madrileño ni la posibilidad de que Canal Gestión Lanzarote abandone la gestión del ciclo integral del agua en la Isla, tal y como hacía la propia Comunidad de Madrid hace tres años. En una respuesta parlamentaria contestada por la presidenta ante una pregunta de Más Madrid, Díaz Ayuso se limita a responder generalidades.

La pregunta, formulada por Alejandro Sánchez, diputado de Más Madrid en la Asamblea de Madrid, tenía el siguiente enunciado: “¿Qué planes tiene Canal de Isabel II para Canal Gestión Lanzarote en el futuro inmediato?”.

En su repuesta, del pasado mes de julio, Díaz Ayuso primero señaló que el ciclo integral del agua se gestiona en Lanzarote desde 2013 y por un periodo de treinta años. “Como empresa pública, nuestro plan es siempre el mismo allá donde prestamos nuestros servicios: nuestro objetivo principal consiste en realizar un servicio esencial para la sociedad de manera satisfactoria para nuestros usuarios, manteniendo comportamientos y actitudes responsables y cercanas a las necesidades de la sociedad a la que servimos”, dice el texto de la respuesta.

“Canal de Isabel II opera en todas sus filiales desde los valores del grupo: compromiso, cercanía, transparencia, excelencia y sostenibilidad, cuidando del medio ambiente y contribuyendo de forma significativa a la mejora de la sostenibilidad en la isla que es Reserva de la Biosfera”, -continúa-. Así, la empresa inició en 2014 un ambicioso programa de actuaciones para luchar contra el cambio climático y en el periodo comprendido entre 2014 y el primer semestre de 2021 hemos evitado la emisión de unas 89.000 toneladas de CO2 a la atmósfera”.

[Noticia relacionada: Las facturas abusivas de Canal Gestión no cesan]

La Comunidad de Madrid hace estas afirmaciones a pesar de la avalancha de quejas durante el último año por parte de los usuarios, que se cuentan por cientos, por facturas infladas por agua no suministrada, por falta de suministro o potencia en muchas zonas de la Isla, un servicio de atención al cliente no resolutivo o por múltiples averías que ascienden a 10.500 euros al año, según los datos de la propia empresa. A esto hay que añadir que la empresa pierde el 58 por ciento del agua que desala, que supone aproximadamente un derroche de 58 millones de kilowatios y unas emisiones de CO2 a la atmósfera por el agua no aprovechada de 23,6 millones de kilos.

La empresa finaliza así su repuesta: “Conscientes además de la problemática del ciclo integral del agua y de la importancia del servicio de gestión del agua en la isla de Lanzarote, se realiza un seguimiento periódico de las necesidades y actuaciones en curso. En este sentido, es de señalar que, en el caso de Lanzarote, la última encuesta realizada para conocer la satisfacción de los clientes arroja un valor global de 7,53 sobre 10, un resultado que consideramos muy positivo”. “Mantenemos contactos periódicos con la administración concesionaria en los que identificamos la problemática y las necesidades del servicio”, concluye la respuesta.

Desinversión

Hay que recordar que, en 2018, la Comunidad de Madrid, gobernada entonces por Cristina Cifuentes, revelaba que había establecido un plan estratégico por el que se comprometía a reorientar sus actuaciones solo al ámbito geográfico de Madrid en un plazo que no superaría el año 2030.

Ese mismo año inició el procedimiento para contratar una empresa consultora que aclarara si Canal Gestión Lanzarote podía ser incluida y cómo, dentro de ese proceso de venta de las filiales, que, excepto en el caso de Lanzarote y de Cáceres, todas operan en América. La única empresa que se presentó a ese concurso fue Banco Santander, pero no se ha vuelto a saber nada sobre ese encargo de consultoría y asesoría financiera para el que había un presupuesto inicial de 2,3 millones de euros.

La decisión de iniciar un proceso de desinversión o venta se tomó en noviembre de 2017 por parte del Consejo de administración de Canal de Isabel II y fue ratificada por la Junta extraordinaria de accionistas.